creativo branding de casa montaña y packaging
Casa montaña
Sabor puro, de la tierra a tu mesa
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Casa Montaña es mucho más que una marca de patatas fritas; representa un homenaje a la tradición, la calidad y la conexión con la naturaleza. Su esencia gira en torno a esos momentos cotidianos que cobran especial significado, como el «tardeo», esas reuniones espontáneas entre amigos donde un snack puede convertirse en el alma de la conversación. Esta marca, construida sobre la dedicación y el cuidado en cada detalle, ha sabido capturar el equilibrio perfecto entre la modernidad y la artesanía, dando lugar a una identidad que se proyecta con fuerza hacia el futuro.
El diseño de la marca se basa en una tipografía cuidadosamente elaborada, cuyas curvas suaves y líneas delicadas evocan naturalidad, mientras que sus remates robustos refuerzan un carácter tradicional y sólido. La elección de un color terroso, el Pantone 478C, que remite a la calidez de la tierra, refuerza la sensación de fiabilidad y conexión con los elementos naturales, consolidando así la identidad visual de Casa Montaña como símbolo de calidad y autenticidad.
La inclusión de una textura topográfica en el diseño no es casual; evoca los paisajes montañosos y refuerza la idea de que cada producto está profundamente arraigado en la tierra, subrayando la naturalidad de los ingredientes y el proceso artesanal que caracteriza a la marca. Este enfoque no solo consolida el presente de Casa Montaña, sino que también la prepara para un futuro prometedor, donde la expansión a otros productos como aceites o frutos secos será una evolución natural dentro de una misma línea de calidad y dedicación.
El objetivo principal de Casa Montaña es lograr que su imagen perdure en el tiempo, garantizando una comunicación coherente que resalte siempre los valores de la marca: la excelencia, la atención al detalle y la autenticidad. Con una identidad versátil y bien definida, esta marca no solo se posiciona como un referente en el mercado de snacks, sino que también se proyecta como un símbolo de confianza y sabor en cualquier mesa, transformando cada encuentro en una experiencia única y memorable.
Sabores auténticos,
conexión natural.
